Mujeres del CUCEA Comparten Experiencias de Acoso y Desigualdad en Jornada de Reflexión

En un espacio de diálogo y sororidad, un grupo de mujeres directivas del Centro Universitario de Ciencias Económico Administrativas (CUCEA) participaron en una emotiva jornada de reflexión, llevada a cabo los pasados 9 y 10 de julio. El encuentro se centró en visibilizar y compartir las experiencias de acoso y desigualdad de género vividas dentro y fuera del ámbito universitario, subrayando la urgencia de un cambio cultural profundo.

La jornada, impulsada por el compromiso del CUCEA con la erradicación de la violencia de género, brindó un foro seguro donde las participantes pudieron expresar sus vivencias. A través de testimonios conmovedores, se hizo evidente cómo las dinámicas de machismo y desigualdad permean la vida cotidiana, incluso en los espacios académicos que deberían ser seguros e inclusivos.

Una de las sesiones más impactantes fue liderada por la Dra. Susana Muñiz, secretaria académica del CUCEA y especialista en estudios de género. La Dra. Muñiz facilitó un espacio donde las participantes pudieron conectar sus historias con los movimientos #MeToo y #MiPrimerAcoso, reconociendo cómo estos movimientos globales han validado y amplificado las voces de miles de mujeres. "Cada testimonio aquí presente nos recuerda que la calle, y a veces la propia universidad, no siempre se sienten como nuestros espacios seguros", afirmó, destacando la manera en que la violencia opera como un mecanismo de exclusión.

Durante el taller, se compartieron ejemplos concretos de violencia sexual y psicológica, desde comentarios sexistas y miradas incómodas hasta insinuaciones, control emocional y manipulación. Muchas de estas formas, a menudo sutiles o "normalizadas", fueron identificadas como parte de un patrón que invisibiliza y minimiza el maltrato. Las participantes reflexionaron sobre cómo estas actitudes, aparentemente menores, contribuyen a un entorno que reproduce la desigualdad.

Se hizo énfasis en la importancia de reconocer estas formas de violencia, que por mucho tiempo han sido calladas. Las asistentes expresaron la necesidad de seguir abriendo estos espacios para la escucha y el apoyo mutuo, y destacaron la valentía de quienes compartieron sus historias.

La jornada también incluyó una explicación detallada del sistema de Primeros Contactos de la Universidad de Guadalajara, un recurso fundamental para la atención a la violencia de género. Se aclaró que estas figuras están específicamente capacitadas para escuchar, acompañar y guiar a las víctimas, asegurando un proceso de apoyo adecuado y confidencial.

Al finalizar, las mujeres participantes coincidieron en que el cambio cultural es una tarea urgente y sustantiva de las universidades. Subrayaron la importancia de continuar generando conciencia, de cuestionar los patrones heredados y de fomentar una cultura basada en el respeto irrestricto a todas las identidades y libertades. La jornada concluyó con un llamado a la acción colectiva para transformar el CUCEA en un referente de seguridad e inclusión para todas y todos.