Migrantes exitosos desde la franquicia social: Presentación de libro

 

Durante los siglos XX y XXI, hubo algunos migrantes de nuestro país que se desplazaron a diferentes ciudades de México, donde se convirtieron en empresarios, en personas de negocios. No sólo cambiaron el rumbo de sus vidas, sino también el de sus comunidades de origen. Sus establecimientos todavía persisten, y a pesar del paso del tiempo no olvidaron sus raíces; aún mantienen relaciones significativas con las comunidades de las que son originarios.

 

El elemento que tienen en común estos migrantes exitosos es haber generado un modelo de negocios peculiar pero eficaz: la franquicia social. Una modalidad de desarrollo empresarial que, ante la falta de recursos económicos, se basa en la maximización de los recursos sociales y culturales, comenta la doctora Paty Arias en el prólogo.

 

A diferencia de franquicias como McDonald’s, Walmart o Starbucks, en la franquicia social el manejo de los negocios se aprende y reproduce entre paisanos. Se basa en relaciones personales de confianza con familiares o amigos de las comunidades de origen. Los trabajadores se seleccionan con base en las relaciones de parentesco, amistad y compadrazgo.

 

Contar las historias de estos migrantes exitosos y el papel fundamental que tuvo la franquicia social en su éxito, es el propósito de “Migrantes Exitosos, la franquicia social como modelo de negocios”. Después de haberse presentado en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), el libro, que es el resultado del trabajo en conjunto de académicos de la UdeG y es coordinado por la doctora UdeG, Patricia Arias, se presentará el jueves 30 de agosto a las 13:00 horas, en Sala de Gobierno del CUCEA.

 

Los casos que se presentan en el texto, son de emprendedores de orígenes rurales modestos -en su mayoría hombres jóvenes- que iniciaron a partir de actividades de muy pequeña escala. Tanto por cuenta propia, como siendo empleados en los establecimientos de sus paisanos en las ciudades, pero que tenían el propósito de independizarse y ser propietarios de un establecimiento en las ciudades.

 

La obra reúne seis artículos y está dividido en dos partes. La primera expone los cuatro ejemplos pioneros y más consolidados de migrantes que emplearon la franquicia social, iniciando sus carreras en 1940, cuando en México comenzaba una nueva etapa de crecimiento económico después de años de incertidumbre económica, política y social. Fue el caso de los taqueros de Santiaguito de Velázquez, en Arandas, y los habitantes de Juanchorrey, Zacatecas, que salieron a vender tortillas a todo el país.

 

La segunda parte está enfocada en dos ejemplos más recientes, que si bien los autores dicen desconocer si se convertirán en actividades totalmente empresariales como las cuatro pioneras, sí tienen elementos que dan cuenta de la persistencia de la franquicia social como modelo de negocios.

 

En los comentarios al libro participarán la doctora Edith Gutiérrez y el doctor Antonio Sánchez Bernal, del Departamento de Estudios Regionales INESER.

 

 

Por Dora Solís
imagen: Diseño del partamento de Estudios Regionales INESER