Se espera estabilidad de la moneda hasta la segunda mitad del año

El Banco de México ha estado previendo un año difícil para el peso mexicano frente al dólar; en ese contexto entrevistamos al Dr. Antonio Ruíz Porras, Coordinador del Doctorado en Estudios Económicos, del CUCEA, para que nos hable de los factores que han influenciado y seguirán influenciando el valor del dólar: como la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), las elecciones legislativas en Estados Unidos y las próximas elecciones en México, los volátiles precios del petróleo y la inestabilidad financiera internacional.

Los incrementos en el precio del dólar afectan directamente a nuestro país, comenta el doctor Ruiz Porras. “México es un país altamente importador, de hecho la suma de importaciones y exportaciones en México es de alrededor del 70 por ciento del PIB, esto significa que de todo lo que se produce en el país un 70 por ciento, aproximadamente, está vinculado al comercio exterior. Y este 70 es importante porque básicamente se valúa en dólares, no en pesos”. Por lo que las negociaciones de México con otros países en materia comercial son de vital importancia en el tema.

Hay rumores que EU quiere salir del TLCAN, ¿si esto llega a suceder qué pasaría con el precio del dólar?

En el peor de los escenarios, que hubiera una renegociación fallida del TLCAN, lo que esperaríamos sería una contracción del comercio entre México y Estados Unidos, en otras palabras, sería una devaluación del peso porque, básicamente, la única manera de competir sería poniendo productos baratos, y un manera muy sencilla de tener productos baratos sería devaluando la moneda.

¿Cuál es el panorama del precio del dólar este año?

Debemos considerar que en este año va a haber dos periodos: en el primer periodo, que son los primeros seis meses del año, el precio del dólar va a estar asociado a la renegociación del TLCAN, y particularmente de los resultados que se deriven de las reuniones en Montreal a finales de este mes, se decidirá en buena parte cómo va a ser el comercio y por tanto cuál va a ser el destino del dólar.

En segundo lugar, va a estar asociado a los cambios de la política monetaria de Estados Unidos. Se están normalizando las tasas de interés en EU y también en México, por lo tanto, muy probablemente, esto presionará a una mayor devaluación de la moneda mexicana.

Tercera. De los factores que habíamos comentado, está la política inflacionaria. Hay que reconocer que la inflación en México está creciendo, y muy probablemente no se cumplirán los pronósticos del Banco de México este año, que estaban establecidos en 3 por ciento de inflación; esto significa que va a poner mayores presiones hacia la devaluación de la moneda mexicana.

Y cuarto punto: tenemos un periodo de incertidumbre asociado a elecciones. Todos estos factores, lo que nos dicen, es que por lo menos la primera mitad del año, lo que podremos esperar va a ser una devaluación de la moneda mexicana, sin embargo… yo esperaría que en la segunda parte del año habría un gradual proceso de reevaluación de la moneda mexicana y una mayor estabilización, eso no significa que vamos a regresar a los niveles de antes, debemos de hacer la aclaración, pero yo esperaría a final del año un tipo de cambio de 18-19 pesos por dólar.

¿Qué medidas económicas debería tomar el país para que el peso mexicano deje de devaluarse ante el dólar?

Evidentemente, sí se ha devaluado el peso de una manera bastante notoria en lo que ha sido el presente sexenio, esto está asociado a factores coyunturales como son el cambio en la presidencia de EU; también estuvo asociado al incremento del déficit fiscal en México; estuvo asociado a la incertidumbre y la volatilidad en los precios del petróleo. Todos estos factores, y la renovación del libre comercio, han dado un impacto de largo plazo sobre la depresión del tipo de cambio.

¿Qué puede hacer el gobierno mexicano en este contexto? Por una parte, ha sido fundamental dar certidumbre a los agentes económicos y financieros. Yo creo que buena parte de esta certidumbre podrá darse a partir de los resultados de la renegociación. En la medida de lo posible, el gobierno debe tratar de evitar tomar medidas de pánico. Y habrá que regularizar la situación fiscal del gobierno federal, actualmente andamos en el déficit más alto en lo que va del milenio, además yo creo que es necesario que el equipo de la política monetaria, que ha sido sustituido por la renuncia de Carstens, tenga un mejor control de la política monetaria.

Yo creo que si damos certidumbre en el área fiscal, vía déficit; en la política monetaria, vía una estabilización de la Junta de Gobierno, y por otra parte, que el gobierno haga esfuerzos para negociar de la mejor manera el TLCAN, yo creo que esos serían elementos de corto plazo que podría aplicar el gobierno para tratar de estabilizar, en la medida de lo posible, la moneda mexicana.

Este año se perfila como un año complicado para la economía mexicana porque, por una parte, han coincidido una serie de factores internos y externos que nos han hecho modificar de manera significativa las relaciones económicas internacionales del país, en ese sentido, debemos pensar que va a ser necesario promover algunas estrategias, como es mayor diversificación de mercados, debemos pensar que no solo dependamos de EU, también lo que es el papel de Asia, Europa y aprovechar las oportunidades que ofrece el Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica. Yo creo que eso es algo que también debemos considerar, que esto nos brinda algunas oportunidades y también como algunas personas lo han pensado, el fortalecimiento del mercado interno es fundamental para la economía mexicana.

Texto y fotos: Daniela Ruiz Velasco