En Jalisco, los asalariados viven bajo condiciones de precariedad

En Jalisco, de las personas de más de doce años que pertenecen al sector ocupado de la población económicamente activa, la mayoría (64 por ciento) trabajan como asalariados generalmente bajo condiciones de precariedad, pues el 9.4 por ciento no recibe ningún tipo de remuneración, el 19.3 por ciento apenas vive con uno o dos salarios mínimos y el grueso de ellos (dos quintas partes) captan un sueldo que va de los 2 a los 5 salarios mínimos. De acuerdo a los resultados de la última Encuesta Nacional de Empleo (ENE) aplicada por el INEGI en el último trimestre de este año, de los 78 mil 418 asalariados en el Estado de Jalisco, el 63 por ciento no cuenta con ningún tipo de prestaciones y poco menos de la mitad carece de contrato fijo. Aunado a las condiciones adversas en la que actualmente laboran los empleados, se suma el descenso en la PEA o población económicamente activa: En el tercer trimestre de 2003, ésta disminuyó con respecto a la registrada en las encuestas en 2001 casi cuatro puntos porcentuales. Esto quiere decir que actualmente, en el Estado, hay menos personas con empleo y las que lo tienen trabajan bajo condiciones poco favorables. Lo anterior es parte de lo que se dio a conocer a alumnos y profesores del Centro Universitario de Ciencias Económicas Administrativas como parte de los eventos programados en la Primera Semana de la Administración. De acuerdo con el Jefe del Departamento de Análisis Económico de la Dirección Regional de Occidente del INEGI, Jorge Antonio Mejía Rodríguez, conocer características sociodemográficas de la población y de las unidades económicas en donde laboran, con el fin de satisfacer la demanda de información oportuna de la población, son el objetivo principal de estas encuestas, que desde el 2001 se aplican de manera trimestral y no anual, como antaño. Respecto a la población económicamente no activa en Jalisco, la ENE arrojó datos importantes respecto a la tasa de desempleo de ocupación abierta en Guadalajara, pues ésta (3.2 por ciento) supera con más de un punto porcentual a la que aplica en todo el Estado (2.7 por ciento). Ahora la gente no trabaja de acuerdo a sus habilidades, conocimientos o preferencias, sino que debe de adaptarse a las exigencias del mercado, cuestión que aumenta considerablemente las cotas de insatisfacción. Cabe señalar que tampoco ayuda el nivel de escolaridad que ostenta el Estado, pues aunque es cierto que en comparación con el 2001 aumentó, esta alza no es suficiente para asegurar una mejora considerable, pues la media en Jalisco es de apenas el segundo año de secundaria. Por otro lado, la ENE aplicada a cuatro mil viviendas sólo en Jalisco- determinó que la falta de experiencia, la insatisfacción personal y el término del contrato y consecuente despido, son las causas principales de desempleo en esta entidad. De acuerdo a Mejía Rodríguez, lo anterior se refleja en el aumento del sector no estructurado o el sector informal, en el que opera el 30.8 por ciento del total de los desempleados. Afirmó también que el panorama futuro no se presenta alentador y que ante él, la principal herramienta será la capacitación y el auto- empleo pues el sector económico actual es, por el momento, incapaz de cubrir totalmente la demanda de empleo, y la competencia por una plaza es cada vez mayor. Adriana Paulina Fabián Unidad de Difusión CUCEA